El doctor Brad Blanton, psicólogo especializado en la gestión del estrés, hace saltar por los aires los mitos, supersticiones y mentiras entre los que vivimos. Demuestra que el estrés no procede de nuestro entorno, sino que es una jaula que creamos en nuestra mente. Y lo que nos mantiene dentro de esa jaula son las mentiras. Todos mentimos y esas mentiras son lo que causa el estrés. Cuando no le decimos a nuestro cónyuge, jefe o amigos lo que sentimos, nos encerramos todavía más en esa jaula. La única salida, el único camino hacia la felicidad, es la honestidad radical. Honestidad radical ha triunfado en todo el mundo porque no es un libro de autoayuda amable. Es una bofetada en la cara para que despertemos, seamos sinceros con los demás y con nosotros mismos y alcancemos la felicidad que nos merecemos.
La decisión de Stark de contar todo fue inspirada, en parte, por la honestidad radical, una filosofía y un libro escrito por Brad Blanton, un psicoterapeuta al que le gusta describirse a sí mismo como "basura blanca con un doctorado".
libro honestidad radical pdf
En esencia, la idea de Blanton es muy simple: cuando eres radicalmente sincero con alguien, le cuentas lo que sientes, lo que has hecho o planeas hacer y lo que realmente piensas. Ser radicalmente honesto significa decir la verdad todoeltiempo y perder ese filtro interno que te dice que guardes ciertas cosas, generalmente espinosas y emocionalmente complicadas, para ti mismo.
La ideología es especialmente relevante para las relaciones, que Blanton cree que están llenas de deshonestidad: "El 85% de las relaciones son mucho más fingidas que auténticas, la mitad o más de los matrimonios rompen, y más de la mitad de los que siguen, apestan".
Reprimir lo que realmente quieres de tu pareja mata silenciosamente la relación, afirma Taber Shadburne, consejero y entrenador de honestidad radical. (Shadburne también ha desarrollado una filosofía de una rama un poco menos extremista llamada relación revolucionaria).
"La honestidad radical es una forma de reintroducir repetidamente el misterio y la emoción, lo vanguardista y lo desconocido, el aprendizaje y el crecimiento, el amor y la intimidad en tu relación".
La honestidad radical también es para los solteros. Imagínate cuántas personas descartarías si les dijeras de inmediato que no quieres tener hijos o que dentro de cinco años quieres mudarte del país y sentar cabeza.
Sin embargo, si ya tienes pareja, tómate la honestidad con calma. Dile a tu pareja que quieres ser más sincero de aquí en adelante; no solo hagas como que se te ha escapado que odias irte de vacaciones con tu familia política.
"Estuvimos juntos tres años y vivimos juntos otros dos", cuenta. "Las razones por las que pusimos fin a nuestra relación no tenían absolutamente nada que ver con los sentimientos pasajeros que tenía respecto a ese otro hombre, y, en verdad, creo que la honestidad radical es lo que nos ayudó a ambos a seguir nuestros propios corazones y avanzar en la dirección que era mejor para los dos", concluye.
Es un libro impresionante, hasta que no lo lees no te das cuenta de la ilusión en la que vives. Además, me ha ayudado a cerrar una relación de forma cordial, y a estar más en contacto conmigo mismo.
Soy una persona diferente, nueva y mejor despues de leer este libro. Este libro me ha salvado la vida. Todo lo que hago, pienso y siento despues de leer este libro tiene que ver con lo que en este libro se explica. Solo una frase: " La verdad solo cambia cuando dices precisamente la verdad"
Así, Staging Habla de Negros es un estudio breve y completo con un exhaustivo análisis literario, teatral y cultural que presenta unas interesantes y atrevidas fluctuaciones en los aspectos transhistóricos y transnacionales de la escenificación de la raza negra. Especialmente interesante resulta que el autor intencionadamente asuma una visión mesurada y ponderada de una realidad [End Page 471] incuestionable: la esclavitud en el Imperio español; lo cual contribuye a no presentar una visión afropesimista sino que dota a los protagonistas del libro, personajes vistos con tremendo cariño, de una presencia real dentro de la cultura que también están construyendo. Además, en cierto sentido se evita la corriente de pensamiento que algunos denominan "leyendanegrista".
Escribí este libro porque a la gente de todo el mundo le fascina la idea del infierno, el diablo y los demonios, y sin embargo hay muy pocos libros buenos y persuasivos sobre el tema. La razón, creo, es que el mal está a nuestro alrededor; de hecho, es el único hecho teológico que no tiene que ser probado con ningún argumento. Basta con leer los periódicos o ver las noticias de la noche para ver historias horribles de todo tipo de maldad imaginable. La gente quiere creer en la justicia y en la idea de que el bien acaba triunfando, pero le cuesta mucho aceptar que un Dios todopoderoso que supuestamente nos ama pueda condenar a alguien a un castigo eterno. Están realmente perplejos. En consecuencia, muchas personas no creen realmente en el infierno. Por eso escribí este libro: Para dar a la gente una respuesta a esta pregunta que puedan entender, y así ayudarles a creer en todo el mensaje del Evangelio sobre la salvación y la condenación
Porque la credibilidad es la clave de este libro. Como acabo de decir, muchas personas, incluso buenos cristianos, tienen problemas para aceptar cómo un Dios todopoderoso, amoroso y misericordioso podría crear un lugar tan horrible como el infierno, y cómo podría obligar a las personas que ama a sufrir allí para siempre. No pueden entender la idea de un Dios que condena a alguien a un castigo eterno. La mayoría de las veces, estas personas tienen buenas intenciones, pero la verdad es que no entienden muy bien el concepto cristiano del infierno o la naturaleza del mal. Para comprender realmente las profundidades del mal diabólico, hay que estar preparado para hacer una honesta auto-reflexión. Tienes que ser capaz de humillarte y buscar en lo más profundo de tu ser para descubrir tu propia capacidad para el mal. Todo el mundo tiene capacidad para el mal. Y todo el mundo, en algún momento de su vida, ha hecho uso de esa capacidad y ha actuado de forma malvada. Para comprender el tipo de maldad que caracteriza a los habitantes del infierno, debes intentar comprender el propio mal. Y la única manera de hacerlo es escarbar y profundizar en tu propia alma, a pesar de las cosas desagradables que puedas hallar. Esencialmente tienes que hacer lo que Dante hizo en su Infierno. Tienes que bajar antes de poder subir. Hay que atravesar la oscuridad de la propia alma, e incluso sumergirse en ella, para salir a la luz. Esto implica una auto honestidad radical, que puede ser extremadamente incómoda e incluso dolorosa. Y, sin embargo, es absolutamente necesario si quieres visualizar los tormentos del infierno en toda su vívida realidad y comprender el tipo de personas que los experimentan.
Cristo habló del infierno once veces en los Evangelios y lo describió en los términos más fuertes posibles. Dejó en claro que el infierno existe, no solo en sentido figurado, metafórico, mitológico, sino literalmente. Hay almas de seres humanos en el infierno ahora mismo, mientras lees estas palabras. Y algún día, después de lo que los cristianos llamamos la resurrección de los muertos, habrá aún más personas en el infierno, no solo espiritualmente sino también en forma corporal. La Biblia utiliza varias palabras hebreas y griegas que se traducen en la palabra española infierno. Por ejemplo, Hades, Tártaro y Seol, que tienen diferentes significados. Pero el infierno del que habla mi libro es el lugar al que Cristo se refirió como Gehena, ese abominable Lago de fuego y Segunda muerte reservado para los condenados; ese lugar de dolor, castigo, crujir de dientes y tristeza por la eternidad. El punto principal que hay que entender sobre todo esto es que Cristo habló de ese infierno, Gehena, en términos que eran mortalmente serios e inequívocos. Dejó muy claro que el infierno es real y eterno, y que el sufrimiento allí también es real.
El infierno se originó con la caída de Satanás y los demonios. Estas criaturas, que originalmente eran ángeles, seres espirituales puros con intelecto y libre albedrío y gran poder, fueron creadas por Dios para ser buenas. Pero las Escrituras nos enseñan que eligieron rechazar libremente a Dios por orgullo; más específicamente, por el deseo de tener el poder de Dios; de ser como Dios, o igual a Dios. Al rechazar a Dios, Satanás rechazó la verdad, porque Dios es la verdad, y al hacerlo se convirtió en un mentiroso y padre de toda mentira. Al rechazar a Dios, Satanás y los otros ángeles caídos rechazaron la bondad, porque Dios es bondad, y al hacerlo, abrazaron todo lo que era malo y dañino y doloroso en la creación. Al rechazar a Dios, Satanás y los demonios rechazaron la luz y la vida, porque Dios es luz y vida, y, al hacerlo, se hundieron en el abismo de la oscuridad y la muerte eterna que llamamos el infierno. Dado que la decisión de rechazar a Dios fue irrevocable (un punto difícil de entender pero que discuto ampliamente en el libro), el infierno siempre existirá. 2ff7e9595c
Comments